
La entrada tuvo bastante éxito, mucha gente había tenido ideas parecidas en la cabeza. Cuando alguna vez, pocas, escribes un texto que estaba en la mente de muchas personas, tocas una cuerda sensible que empieza a vibrar y comunicarse. Nos llevó entonces a hacer algunas fotografías vacías, espacios desolados en el límite de la ciudad.
Hemos repetido ya que la idea no es que "limpien" el camino y las desplacen aún más lejos donde sean un poco más invisibles. Esa sería la medida más rápida y fácil para autoridades y la más injusta para las mujeres. La prostitución se ha de abordar de manera global con ideas laborales, de higiene, de seguridad, de privacidad, de libertad... no es una cuestión de dónde, si no sobre todo de cómo.
En medio de todas estas reflexiones aparece esta semana en el Caminàs otro grafiti, más elaborado, más grande, más directo, más polémico... una de las prostitutas del Caminàs se va a la romería de las cañas como una castellonera más. El discurso de la obra toca una de los temas más enraizados en la ciudad (uno de los que suscitan más polémicas, como bien recordamos en este blog tras la quema accidental de las gaiatas); las interpretaciones de la imagen son múltiples, pero ¿os imagináis el paso de autoridades y damas en la romería entre prostitutas y hogueras? Las sinergias existen y aquí estamos ante una que señala la hipocresía de la ciudad: si no somos capaces de afrontar la situación deberemos aprender a convivir con ella e incluirla en nuestras tradiciones, sin hipocresías ni medias tintas. El street art será irreverente o no será.
3 comentarios:
Molt guapo!
eixes si que son les xiquetes del meneo.
No creo que hagan mucho caso de ello, pero me parece un articulo de puta madre y un grafiti magnifico hecho en un lugar y un momento idoneo.
Publicar un comentario