Aquí en Castellón, como no podía ser de otra manera, las Navidades están pasando con alegría, consumo, felicidad, regalos, familia, comilonas, derroche y tradición. En este año que empieza estaremos en el paro, como media provincia; la otra media estará aceptando cualquier trabajo mal pagado, renunciando a cualquier derecho adquirido con tal de tener una pequeña nómina a fin de mes. Las pequeñas empresas que fueron afortunadas de trabajar para el sector público, no podrán soportar el nivel de impagos y deudas, y sin crédito, cerraran; si no es que han cerrado ya. El nuevo año comenzará con una bonita recesión, mientras la lotería la ganan siempre los mismos y las adjudicaciones se otorgan al mejor (im)postor. No hay escándalo suficientemente vergonzoso ni saqueo suficientemente descarado para que nos paremos a pensar ni un minuto de donde venimos ni a donde vamos; para que cambiemos el rumbo de esta tierra maltrecha por la ruina y el dispendio. Buscad un enchufe milagroso o un contrato basura y dad gracias a la voz de nuestro amo.
Papa Noel no ha resistido más, ha decidido terminar con todo. No tiene valor para ver la que se avecina, ni para aceptar que es todo culpa suya. El tribunal de la Haya ya no deberá perseguirlo y juzgarlo como símbolo de una sociedad que vende ciudadanos para comprar consumidores. El estado del bienestar ha muerto y nace el estado del "biencomprar". Hasta ahora comprábamos bienes de consumo: comida, ropa, viajes, coches... ahora deberemos comprar las necesidades más básicas e irrenunciables: nuestra salud, nuestra jubilación, nuestra educación... y ya sabeis, tanto tienes, tanto vales: si tienes suerte irás a Colegios Lacoste, Hospitales Nike y tendrás un retiro Dolce&Gabana... y si no puedes comprarte esos, irás al colegio Laposte, te curarás en el centro de Salud IVike y con un poco de suerte, morirás antes de cobrar tu jubilación Dulce&Campana.
Papa Noel se ha colgado en la esquina de la calle Campoamor con Pescadores, en una casa en obras desde hace 10 años en la plaza Hernán Cortés. Es tiempo de usar la imaginación, para convertir nuestros problemas en soluciones.
Feliz crisis.
PD. Que tengan cuidado los 3 reyes magos.
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2 comentarios:
... y en contra de lo que mucha gente pueda pensar, los niños son los qe más contentos se ponen cuando lo ven.
los niños deben estar hasta el gorro de ver Papa Noeles escalando balcones... mira, no estaría mal hacer una entrada sobre esta espeluznante nueva tradición.
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